Amistad, Divino Tesoro

¿Qué pasa con esas personas en quienes depositamos toda
nuestra confianza y amistad que ha sido truncada desde mucho
tiempo pero recuperada en el presente, y que sienten, porque así
se lo demostramos, que en la vida estamos para tenderles
la mano, ayudarlos, apoyarlos y alentarlos...a pesar de poder
estar sintiéndonos igual o peor que ellos, pero sin importarnos
nuestros pensamientos o cómo arreglaremos nuestras
propias vidas?

Siento tristeza, porque nada es lo que parece y aunque quiera
que las personas actúen a veces como yo, sé que es una utopía,
pues todo lo que quiero o puedo hacer por los demás, la
mayoría de las veces será de ida pues no será recíproco, y aunque
para mi lo más lindo es ayudar, debo ser capaz
de entender que hay que dar sin esperar recibir...

Estamos en un mundo demasiado egoísta, donde las personas sólo
se preocupan por ellos mismos y no son capaces de mirar un poco más
allá, muy cerca quizás, para ver que también se necesita de su apoyo,
pues nadie esta exento de problemas ni carencias afectivas...y que sólo
nos conformaríamos con una simple pero sincera amistad.