miércoles, septiembre 27, 2006

Tristeza compartida



Estoy muy triste, a veces creyendo que será un día
fácil, sin conflictos de ninguna especie y preparada
mentalmente para soportar mi entrenamiento físico
que me lo tomo muy en serio, entonces pasan cosas que logran
afectarme tanto....,que no soy capaz de salir de la casa,
mi ánimo y pena pueden mucho más por el sentir de una
persona que no tiene culpas, algo irresponsable por la edad,
pero como cualquier ser humano comete errores, a él no le
ha faltado estar dentro de lo normal....

Me pregunto si YO tengo culpa, de sentir tanta empatía que no
logro desligarme e irme a hacer mis cosas? Es mi hijo, quiere
ayuda y apoyo.....Siento impotencia, muchísima. Todo recae sobre
mis hombros y cuando siento que todo va bien encausado,
aparece alguien quien en dos segundos derrumba todo!!

Me contaba que le había ido bien en su prueba, mientras
almorzábamos y yo seguía con mucha atención y entusiasmo
lo que me decía, ...y??.. La paz llegó a su término,
recriminaciones de pruebas pasadas no muy bien calificadas,
cosas sin tanta importancia que van cambiando día a día,
¿Pero que pasa entonces?......¡¡Todo se va a la punta del cerro!!


Nuevamente estoy sola en mi pieza, mi hijo en la suya durmiendo;
Lo acompañé, su mirada estaba triste y no pude hacer ojos ciegos, ni
hacer como que nada había sucedido.....Ahora lo acompaño, estoy
en mi pieza, pero sabe que no salí, se lo dije, lo iba a acompañar, no
estaría solo.......y yo.....estoy aquí,... desahogándome de esta manera.

Ojalá no sucedieran cosas tan sin importancia que las hagan ver
tan grandes y sin remedio.... Porque el daño que causa es doble,
ya que reparar un corazón resentido, quebrado e impotente....sin duda
es difícil,... y el de mi hijo no merece estar así, por ningún motivo!!
Porque es un hijo maravilloso, mi hijo, y merece comprensión, mucho
apoyo y mucho amor....Es mi hijo...